Para que la mujer pueda ejercer su derecho de amamantar a su bebé necesita de unas redes de apoyo que incluyen a la familia y la sociedad; a los hospitales y proveedores de servicios de salud; a los lugares de trabajo o empleo; al gobierno y la protección legal. Las madres necesitan que se les escuche de manera entusiasta, que se les ofrezca información básica, certera, veraz y a tiempo. Necesitan igualmente ayuda práctica y profesional y mucho apoyo y estímulo.
La familia y las amistades - Son la red de apoyo más cercana que tiene la mujer. Este apoyo facilita grandemente la lactancia y ayuda a la madre a apoderarse para seguir dando el pecho. La opinión y actitud del esposo ante la lactancia tiene una influencia muy importante sobre la madre. Cuando una madre está rodeada de familiares que no lactaron, es más difícil para ella iniciar y continuar la lactancia. Los consejos equivocados, bien o mal intencionados, pueden sabotear la decisión de lactar de una mujer. El esposo, los familiares y los amigos deben educarse para que puedan ayudarlas y brindarles información que contrarreste las influencias negativas que estas puedan recibir por lo que ven, leen o escuchan a través de los medios de comunicación.
La responsabilidad del cuidado y crianza de los niños y niñas y las tareas del hogar deben ser compartidas con el compañero de lo contrario la carga para la mujer es muy pesada e injusta.
Los hospitales y los proveedores de servicios de salud - Las instalaciones de servicio de salud y su personal tienen un impacto directo sobre la lactancia materna. Las prácticas hospitalarias afectan grandemente la lactancia porque interfieren en su inicio. Veamos algunas de ellas: ofrecer al recién nacido suplementos de agua, glucosa o fórmula; no darle el infante a la madre durante la primera media hora después del parto; separar a la madre y al bebe sin permitir el alojamiento en conjunto las 24 horas del día; ofrecer chupetes o biberones; y regalar paquetes con fórmula o sucedáneos de leche materna .
La poca educación y adiestramiento del personal de servicios de salud para apoyar en el inicio del amamantamiento afecta negativamente el futuro de la lactancia. La mayoría de los profesionales de la salud que trabaja en el área de cuidados materno infantil carece de las destrezas mínimas para ofrecer ayuda básica en lactancia. Lamentablemente, todavía existen profesionales de la salud que les dicen a los padres y las madres que la alimentación con fórmula es igual a la alimentación con leche materna, y que lactar es meramente un acto romántico.
La evidencia científica demuestra que estas prácticas hospitalarias y la pobre capacitación del proveedor de servicios de salud se unen a la medicalización del parto (la elevada tasa de cesáreas, el uso rutinario del monitor electrónico, las inducciones electivas, el uso de analgesia/anestesia farmacológica y el uso indiscriminado de la episiotomía) para impedir que las madres den el pecho a sus bebés.
Los lugares de trabajo o empleo - Las madres empleadas enfrentan muchos retos según sea su tipo de empleo. La madre lactante necesita extraerse leche de sus pechos, por lo menos, cada 3 horas para mantener su producción y tener suficiente para suplir las necesidades de su hijo o hija cuando están separados. Para esto, la madre necesita un ambiente propicio que le garantice sus periodos de extracción en un lugar apropiado que sea limpio y privado. La legislación actual ofrece 1 hora diaria para extracción de leche que puede ser dividida en 3 periodos de 20 minutos. Sin embargo, no garantiza tiempo adecuado para las empleadas de pequeños negocios, ni tiempo alguno para las empleadas a jornada parcial.
El gobierno y la protección legal - Aunque en Puerto Rico contamos con algunas leyes que protegen la lactancia materna y con una política pública de lactancia materna, la vigilancia del cumplimiento de estas leyes y el desarrollo de un plan estratégico para la implantación de la política pública no han sido efectivos. El gobierno en todas sus ramas es responsable de que estas leyes se creen y se cumplan. El estado tiene la responsabilidad de desarrollar políticas y legislación que abarquen el Código Internacional de Sucedáneos de la Leche Materna y sus resoluciones posteriores, para que las madres puedan estar protegidas de la influencia comercial que sabotea la lactancia y su éxito.
El apoyo durante la lactancia no es solo un asunto de mujeres. Todos tenemos una responsabilidad y un papel importante en ese apoyo. ¡Apoyando a la madre lactante ayudamos a construir su éxito y todos y todas ganamos!
Ana M. Parrilla Rodríguez, MD, MPH, FABM, LCCE
Referencias:
World Breastfeeding Week 2008 Action Folder. Mother Support: Going for the Gold. WABA. http://worldbreastfeedingweek.org/pdf/Action_Folder08_pages.pdf
Parrilla Rodríguez, AM. Guía práctica para una lactancia exitosa. (2nd Ed). San Juan, Comunicadora Koiné, Inc. 2007.
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